Las obras de Alexis Sevenier revelan tanto una infinita suavidad y una sensualidad despreocupada. El fotógrafo francés empezó con su práctica con la fotografía de concierto cuando tenía 15 años y dejó la fotografía por más de una década.

Ya que el artista volvió a su amor por la fotografía, admite que lo extrañó mucho. Sus fotos nos impactan con su instantaneidad y precisión. También captura las sombras luminosas con sutileza.